Hoy abrí los ojos

     Hola, quiero contarte algo. Hoy me di cuenta de muchas cosas. Hoy, después de tantos años he abierto los ojos, y he notado que no me gusta la forma en que vivimos. Me duele en el alma que haya hambre, guerras, pobreza, enfermedad. Me deja vacío el corazón saber que se nos ha olvidado saber de dónde venimos, que nos estamos matando los unos a los otros, aun cuando somos hermanos, que hay unos que tienen demasiado y otros que no tienen nada, que unos darían todo por un minuto más de vida y otros que se suicidan, unos que se quejan de cosas estúpidas y gente en fase terminal con una sonrisa.

     Hoy el mundo me puso a pensar por qué cuentan más las cirugías estéticas, por qué la sociedad nos impone estereotipos de los que aseguran es “la belleza”, nos venden revistas, masajes, cortes de pelo y el quirófano, por si acaso te quieres cambiar todo. Es muy triste como el ser humano se deja llevar por las cosas físicas, por las apariencias, por lo superficial, y pone a un lado lo más importante. ¿Y sabes que me pregunte hoy? Por qué no hay pastillas, ni cremas, ni masajes para ser mejor persona, para saber perdonar, por qué no hay una liposucción para sacar el rencor, el dolor y el orgullo que tiene todo el mundo, por qué no hay un implante de conciencia, de compasión, de perdón. Realmente me invadió la tristeza al abrir los ojos y ver en lo que se ha convertido el mundo.

     ¡Es tan fácil juzgar y tan difícil reconocer nuestros errores! Es tan fácil criticar y hablar de los demás y tan difícil aceptarnos y amarnos a nosotros mismos. Eso es triste, pero al final hay que luchar por nuestros sueños sin importar los que digan de ti.

     Yo quiero que le demos valor a la vida, a las pequeñas cosas que hacen grande nuestra estancia en esta tierra, quiero que una sonrisa nos ilumine el alma, quiero que todos tengan un abrazo sincero, un te quiero, que trabajemos, que no nos demos por vencido, que en donde haya maldad sembremos paz, que poco a poco seamos mejores seres humanos, que no nos perdamos en el camino fácil de la vida, que disfrutamos y vivamos pero conscientes de nuestros actos para ser realmente libres y aceptar que todos somos diferentes y que hasta tu peor enemigo es un ser único que también esta en busca de la felicidad y el amor.

     Hay que rencontrar esa plenitud que hay en cada uno de nosotros y meditar que es lo qué realmente queremos. No que esperan los demás, no que quieren los demás, tu eres lo mas importante.